47-K’un

K’un: la desazón (la opresión)

Arriba Tui, lo sereno, el lago

Debajo K’an, lo abismal, el agua

Solución general: En épocas de agotamiento, de
contrariedad, no se puede hacer otra cosa más que aceptar el destino y
permanecer fiel a uno mismo. Solamente nuestra autentica naturaleza interior es
superior a todo destino adverso, y solamente con ella podemos superar la
adversidad de manera que cuando esta pase podamos seguir gozando de la vida y de
nuestro camino de crecimiento espiritual.
El lago esta vacío, agotado. Los
importantes se ven oprimidos por los de baja condición. De esta manera, toca
esperar tiempos mejores, una espera en la cual soportaremos la opresión
manteniéndonos interiormente fieles a nuestra verdad interior aunque
exteriormente tengamos que doblegarnos como lo hacen los juncos ante los
vendavales. Cuando el vendaval pasa, el junco se levanta porque aunque se ha
doblado ante la adversidad nunca se deja romper interiormente, siempre conserva
su naturaleza original, nunca deja de ser un junco.

Mutaciones
(se leen de abajo arriba)

Mutación de
la línea 1:

Si uno no es fuerte interiormente, cada vez se une más, y toda
la posibilidad de encontrar una salida queda cortada. Existe una ceguera
interior que debe superarse a toda costa.

Mutación de la línea 2:

Le damos demasiada importancia a cosas que no la tienen y eso
nos provoca malestar pues pensamos que no hay escapatoria. En esta situación, la
actitud correcta es la de afrontar las dificultades mediante actitudes
espirituales.

Mutación de la línea 3:

La inquietud hace que al emprender cosas aparezcan los
obstáculos, los cuales solo causan desazón si se arremete contra ellos de forma
irreflexiva, y corremos el riesgo de buscar apoyo en cosas que no son
sólidas.

Mutación de la línea 4:

No somos capaces de actuar con la suficiente rapidez y energía
donde es necesario, y abordamos el asunto con vacilación y falta de decisión.

Mutación de la línea 5:

Nos preocupamos sinceramente por el bienestar de los demás,
pero nos vemos oprimidos desde arriba y desde abajo. No encontramos ayuda entre
quienes tienen el deber de dárnosla.

Mutación de la línea 6:

Nos sentimos agobiados, atados, pero las cuerdas que nos atan
son fáciles de cortar. La opresión se aproxima a su fin. Pero todavía estamos
indecisos.

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