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Yü: el entusiasmo
Arriba Chen, lo suscitativo, el trueno
Debajo K’un, lo receptivo, la tierra
Solución general: En las sociedades humanas, o
en un solo individuo, solo serán bien recibidas, solo despertaran entusiasmo,
aquellas leyes que se hallan arraigadas en la verdadera naturaleza de los seres
humanos, pues las leyes que contradicen ese sentir solo provocan el
resentimiento y el rechazo de la gente.
Hay que eliminar las tensiones
acumuladas, tanto las que tenemos en nuestro interior, como las que existen
entre nosotros y quienes nos rodean. El I Ching recomienda la música como método
para eliminar esas tensiones. También se podría utilizar cualquier otro método
que relaje y alegre o bien algo que eleve la espiritualidad.
Mutaciones
(se leen de abajo arriba)
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Mutación de
la línea 1:
Quien estando en baja posición pero teniendo relaciones
distinguidas, se enorgullece de ello, atrae sobre sí el malestar. El entusiasmo
jamás ha de ser un sentimiento egoísta, pues solo se justifica cuando forma
parte de un punto de unión con quienes nos rodean.
Mutación de la línea 2:
Se ha de permanecer libre de ilusiones fantasiosas por muy
entusiasmadoras que puedan resultar, y ver la forma objetiva de cual es la
situación real del momento.
Mutación de la línea 3:
La duda es siempre saludable, pero cuando la duda dura mucho
tiempo se convierte en vacilación, y eso hará que tengamos que arrepentirnos d
nuestro actos y actitudes.
Mutación de la línea 4:
Quien está seguro de si mismo, quien no se muestra escrupuloso,
quien es autentico y no alberga dudas, provoca el entusiasmo de los demás hacia
su persona. Al brindarles confianza, los conquista a fin de que colaboren con él
con entusiasmo.
Mutación de la línea 5:
Aquí el entusiasmo se ve impedido. Se halla uno bajo una
constante presión que no le deja respirar. Sin embargo, esta situación tiene su
lado positivo. Al no poder actuar, uno se ahorra las fuerzas que podría perder
en esfuerzos inútiles.
Mutación de la línea 6:
Si uno se deja cegar por el entusiasmo, la cosa tendrá malas
consecuencias, pero si hallándose uno en pleno entusiasmo sabe rectificar, aún
esta a tiempo de evitar los
problemas.
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